Finaliza otro día de duro trabajo en este bello lugar, los jugadores siguen en el acondicionamiento físico y en la preparación con miras a sus próximos compromisos en el balompié nacional como internacional.

La actividad es fuerte, pero el buen ambiente en el grupo levanta el ánimo de cada uno de los jugadores que cumplen con sus labores en búsqueda de lograr el mejor estado atlético y futbolístico que se requiere en competencias de alto rendimiento.
La última sesión fue en la cancha del hotel de concentración, el mismo lugar en donde se realizaron las dos anteriores etapas del día; ahí, el profesor Benjamín Galindo hizo el interescuadras en la mitad de la cancha, dos equipos de 11 disputaban el esférico para intentar meter gol en una sola portería, resguardada, por momentos, con Yosgart Gutiérrez y Julio César Valdivia.
Antes de la parte futbolística, los jugadores hicieron una rueda y dos elementos disputaban el balón lanzado por el resto del grupo con las manos, la idea era atrapar la pelota para ocupar un lugar en el círculo para relevar al compañero.
Los porteros también con su actividad, corrían, se lanzaban, brincaban y atrapaban el balón, una constante en toda la práctica para los arqueros, que a pesar del intenso calor, portaban con orgullo el uniforme negro de pans y sueter en todo el entrenamiento.
Cada 15 minutos, el preparador físico Luiz Duarte, recomendó a los jugadores hidratarse, pues el calor era intenso y se necesitaba recuperar energías.
Terminó el trabajo a las 20:00 y los jugadores fueron de nueva cuenta a los botes con hielo, con la finalidad de mitigar el cansancio muscular; cada uno de los futbolistas permanecías 5 minutos en grupo de a tres.

La actividad es fuerte, pero el buen ambiente en el grupo levanta el ánimo de cada uno de los jugadores que cumplen con sus labores en búsqueda de lograr el mejor estado atlético y futbolístico que se requiere en competencias de alto rendimiento.
La última sesión fue en la cancha del hotel de concentración, el mismo lugar en donde se realizaron las dos anteriores etapas del día; ahí, el profesor Benjamín Galindo hizo el interescuadras en la mitad de la cancha, dos equipos de 11 disputaban el esférico para intentar meter gol en una sola portería, resguardada, por momentos, con Yosgart Gutiérrez y Julio César Valdivia.
Antes de la parte futbolística, los jugadores hicieron una rueda y dos elementos disputaban el balón lanzado por el resto del grupo con las manos, la idea era atrapar la pelota para ocupar un lugar en el círculo para relevar al compañero.
Los porteros también con su actividad, corrían, se lanzaban, brincaban y atrapaban el balón, una constante en toda la práctica para los arqueros, que a pesar del intenso calor, portaban con orgullo el uniforme negro de pans y sueter en todo el entrenamiento.
Cada 15 minutos, el preparador físico Luiz Duarte, recomendó a los jugadores hidratarse, pues el calor era intenso y se necesitaba recuperar energías.
Terminó el trabajo a las 20:00 y los jugadores fueron de nueva cuenta a los botes con hielo, con la finalidad de mitigar el cansancio muscular; cada uno de los futbolistas permanecías 5 minutos en grupo de a tres.
Mañana, la práctica será en la playa y los medios de comunicación harán sus entrevistas una vez que regresen los jugadores al hotel de concentración.
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